Ayer tenía el día inspirado y se me ocurrieron mil cosas. Como no tenía tiempo lo dejé para hoy.
Hoy se me ha secado el cerebro y no se me ocurre nada. Ni siquiera lo que se me ocurrió ayer... ni me acuerdo en que estaba pensando…
¡Qué desastre!
lunes, 27 de julio de 2009
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vaya, esperaremos a mañana a ver si vuelve la memoria
ResponderEliminarcuídate!